miércoles, 25 de junio de 2008

Fisgona advenediza


Hurgas mis cuitas
Expectante a la reacción
Convertida en fisgona
De lo que omito olvidar.

Examinas mis harapos,
Mis vestimentas,
Mis cabellos,
Mi indefinible libertad;
Los recodos expuestos
A tu franco interés.
El remanso del verso
Humedece al autor involucrado,
Y forcejeas con el destino,
En otro tiempo;
Con otro historia,
Con cada fulano(a),
Para volver a la burla forzada,
Para juzgar mi resolución.

Yo siempre fui de tu incoherencia
Tu punto flojo a la facilidad,
Tu estribo irremediable a la sexualidad,
Yo era necio y tu mi indisoluble necedad;
Tu eras mi arrepentida incomodidad,
El consorte cuantitativo a la informalidad,
La caricia geométrica
Con sabor a sal.

Y curioseas mis lágrimas
Sin dejar ver,
Sin dejar mirar.

Escarbas mis huellas,
Te pruebas mis zapatos
Gastados de meditar,
Te pruebas mi pulóver,
Mis bóxeres
Y estoy harto de jugar.

Consumes mis cigarros,
Apagas mis cerillos,
Enciendes mis ojos,
Y me vuelves a alborotar.

Juegas con mis sobrinos
Acaricias a mi madre
Y me arrebatas personalidad.

Haces mis labores
Tramitas mis documentos,
Y piensas por mí;

Escondes mis vicios
Gastas mi tiempo
Te miras en mi espejo:
Dulce imagen que no logro divisar.

Terminas mis frases,
Rimas mis versos,
Cantas mis poemas,
Seduces a las mujeres que pretendo,
Haces el amor con mis amigas
Y te reinventas mujer.

Te conviertes en mi histeria
Me destierras
Me aíslas
Me haces retroceder
Me haces declinar.

Te metes entre mis pantalones
Me masturbas
Me haces excitar
Me acaricias con una bofetada
Y me engendras hontanar

Luego de sustraerme espontaneidad
Luego de fisgonear
Me abandonas / me colmas de ansiedad
Y no compartes mi soledad.

martes, 10 de junio de 2008

Versos en la azotea

Versos en la azotea
Sonetillos en el buró
Poemas en la agenda
En una fecha que no es hoy.

Alejandrinos de alabastro
Tatuados en un sillón
Décimas que cincelaron
Esta truhana desazón.

Versos en la azotea
Un gato los recitó
Concebido en la calamina
Cansado de rasgar latón.

Elegías en la bragueta,
En el trémulo seductor
En los labios del que flagela
Del que finge una pasión.

Versos en la azotea
Candidez sin pavor
Y su desvelada autoría…
En el anonimato se esculpió.